Aunque intenten aparentar lo contrario, todos los partidos comparten la misma perspectiva a la hora de atajar el problema de la vivienda: aumentar el negocio.
Además, ninguno ha puesto en marcha medidas de urgencia básicas que ataquen el negocio.
- Todos ellos, sin distinción, apuestan por impulsar un nuevo ciclo constructor en base a colaboración público-privada. De hecho, según la Ley de Vivienda, para las “zonas tensionadas” se debe elaborar un plan de tres años que consiste, siempre, en aumentar la oferta de vivienda.
- Ayudas económicas a propietarios: aunque EHBildu criticara recientemente las ayudas Gaztelagun, en Navarra ha acordado medidas idénticas. También Sumar y Podemos criticaron en un momento y apoyaron en muchos otros.
- Exenciones fiscales a propietarios: Aunque Podemos y EHBildu se hayan declarado críticos, la propia Ley de Vivienda que apoyaron incluye estas medidas. Y de nuevo, lo que critican en la CAV lo aplican en Navarra: exenciones de hasta el 90% para propietarios.
- Medidas contra la ocupación: El PNV y el PSOE han sido punta de lanza en la represión y criminalización. Se suma el “error” de EHBildu, las campañas antiocupación de Más Madrid o la exclusión de los casos de ocupación de la moratoria mientras Podemos estaba en el Gobierno.
- Restricciones en la RGI: La reforma del reglamento de la RGI, que incluía más restricciones, fue aprobada gracias al voto de Podemos. EHBildu, por su parte, se abstuvo contentándose con que algunas de sus enmiendas fueran incluidas y contradiciendo a colectivos sociales.
- Ninguno propone la bajada generalizada de los precios de la vivienda: esta es una propuesta que no puede encontrarse en ningún programa. Incluso Podemos, desde la marginalidad política y su proceso de radicalización discursiva, reduce la propuesta al precio del alquiler.
- Ninguno propone la suspensión incondicional y permanente de todos los desahucios: Es más, con la moratoria y la Ley de Vivienda han hecho campaña anunciando que los desahucios estaban “prohibidos” mientras más del 70% se ejecutaban en Euskal Herria.
- Ninguno propone la ilegalización de empresas de desokupación: aunque Podemos incluyera este punto tras salir del Gobierno, en 4 años no hizo nada. Tampoco se ha hecho nada desde el resto de los partidos.
Conclusión: Los pilares fundamentales de las políticas de vivienda burguesas son comunes a todos los partidos. No puede despistarnos el juego entre oposición y gestión; ninguno de los partidos mencionados ha salido del molde cuando ha tenido puestos de gestión.
Muestra de ello es la comparativa entre la CAV y Navarra. Mientras desde la oposición se critican algunas cosas en la CAV, en Navarra, la Consejera de Vivienda es de Podemos y EHBildu sostiene el Gobierno y tiene la alcaldía de Iruñea; y los resultados no sorprenden a nadie.
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