Sucedió en el barrio de Molins, Mataró. Militantes de la Organización Juvenil Socialista (OJS) desarrollaban una charla sobre el porqué del auge reaccionario. A sólo unos metros de distancia Vox de Mataró puso un tenderete para difundir su habitual discurso de corte fascista.
Para poner punto final a su actividad, militantes de la OJS se acercaron con cubos de pintura y la arrojaron al chiringuito de Vox. La OJS expresó que seguirán respondiendo a sus discursos de odio.