El portavoz hutí, Yahya Saree, describió una serie de ataques de sus fuerzas que afirmaban haber tenido como objetivo el portaaviones estadounidense Dwight D. Eisenhower en represalia por la “agresión brutal” de las fuerzas estadounidenses y británicas.
Los funcionarios estadounidenses niegan el ataque.
El comunicado hutí confirma que “la fuerza de misiles y la fuerza naval llevaron a cabo una operación militar conjunta” contra el Eisenhower en el Mar Rojo. Dijeron que el ataque se llevó a cabo con misiles y afirmaron que fue “preciso y directo”.
Se dijo que era una represalia por los ataques israelíes contra Rafah, que supuestamente mataron a 58 personas, así como por los ataques de las fuerzas estadounidenses y británicas durante la noche contra las zonas hutíes de Yemen. Afirman que seis ataques estadounidenses y británicos mataron a 58 personas e hirieron a otras 41, incluidos civiles.
El Comando Central de Estados Unidos confirmó que las fuerzas estadounidenses habían identificado amenazas adicionales por parte de los hutíes, pero no informaron de las consecuencias del ataque hutí en el famoso portaviones.