Xabier Pérez Aldunate fue detenido en febrero de 2005 y condenado a 35 años de prisión acusado de intentar ejecutar a Juan Carlos, rey de España. Durante ese juicio, denunció ante el tribunal que había sido torturado por la policía, pero esto no abrió ninguna investigación. Tras estar varios años disperso, en noviembre de 2020 el preso político vasco fue trasladado al centro penitenciario de Pamplona, desde la cárcel de Córdoba.
Posteriormente, fue trasladado a Martuteneco, donde estuvo seis meses, hasta regresar a la Txantrea en mayo de 2021. A partir de ese momento cumplió en su país la pena de prisión que le impusieron los tribunales españoles, mediante el segundo grado reducido.
En enero de 2024 fue condenado en tercer grado y hoy salió en libertad condicional.
(Texto original en Euskara, en La Haine).
