El pueblo venezolano se ha movilizado masivamente en Caracas para exigir la liberación de sus connacionales secuestrados en El Salvador. La protesta, convocada por el PSUV, denuncia la violación de los derechos humanos de los migrantes venezolanos por parte del gobierno de Nayib Bukele, en colaboración con Estados Unidos. Los manifestantes, que incluyen familiares de los detenidos, exigen la inmediata liberación de los migrantes, muchos de los cuales han sido etiquetados injustamente como criminales, especialmente los acusados de pertenecer al Tren de Aragua.
La campaña también ha sido apoyada en redes sociales con el lema “migrar no es un delito”, buscando visibilizar la injusticia contra los venezolanos en el extranjero. El gobierno de Venezuela por su parte ha implementado el Plan Vuelta a la Patria, para repatriar a aquellos migrantes que desean regresar, mientras continúan denunciando la discriminación y los abusos de los derechos humanos en otros países, incluidos los EE.UU., que también han restringido la entrada de venezolanos.