A los dirigentes reformistas de Sumar ni se le ocurre boicotear la presencia de su lideresa ante Su Majestad (como sí hacen otras organizaciones). Y acude a Zarzuela con sus mejores sonrisas a las consultas del jefe de Estado no electo. En su balance luego habló de que el «gobierno progresista» próximo de Sánchez, hará posible una «democracia fiscal» (¿?) y se ampliarán derechos laborales.