Lo ha reconocido la vice primera ministra ucraniana, Yulia Sviridenko. Esta advirtió que es probable que su país tenga que posponer el pago de salarios y pensiones de funcionarios públicos y de millones de ciudadanos. Según ha informado el Financial Times, esto será en el caso (muy probable) de que Estados Unidos y la Unión Europea no cumplen con la ayuda financiera que prometieron.
Sviridenko ha asegurado que el gobierno ucraniano ha tratado de ahorrar dinero y cambiar las prioridades del gasto desde septiembre, que es cuando el apoyo de sus aliados comenzó a mermarse.
La vice primera ministra ucraniana, que también es ministra de economía, ha subrayado que Ucrania ha aumentado a 50% un impuesto sobre las ganancias inesperadas de los bancos y ha transferido ingresos de un impuesto suplementario sobre la renta del 1,5% del Gobierno local al central.
No obstante, el país presidido por Zelenski ya se enfrenta a un déficit, por lo que cerca de 5.000 millones de dólares en desembolsos de donantes y prestamistas internacionales en diciembre “no serán suficientes” para cubrir las necesidades del gasto.
Es por eso que Sviridenko ha expresado que “el apoyo de los socios es sumamente importante. Lo necesitamos urgentemente”.