El servicio de prensa del Ministerio de Emergencias de Rusia, ha informado que sus empleados han rescatado a 10 personas mientras 28 personas, entre ellas un niño, fueron asesinados.
El hecho ha tenido lugar en la ciudad de Lisichansk, República Popular de Lugansk (RPL). Según dicho Ministerio, a pesar de la amenaza de un segundo bombardeo, “los rescatistas arriesgan sus vidas y continúan limpiando los escombros y buscando supervivientes”.
Cabe recordar que Lisichansk se encuentra cerca de la línea del frente. Abandonando la ciudad, las tropas ucranianas destruyeron varios edificios administrativos y dañaron otra infraestructura importante.