Turquía ha bloqueado en los últimos meses la entrada de Suecia en la OTAN (para que Suecia ingrese necesita que no se oponga ningún gobierno otanico) esgrimiendo la presencia de miles de kurdos en Suecia. Erdogan y su mafia consideran «terroristas» a un sinfín de militantes kurdos que residen -muchos de ellos desde hace décadas- en Suecia. Pero, era evidente que Turquía aplicaría más temprano que tarde un «¿qué hay de lo mío?» y lo ha encontrado en la clave: dejarlos entrar en la U.E.
El presidente turco, Tayyip Erdogán, vinculó en un discurso el acceso de Suecia a la OTAN a la entrada de Turquía a la Unión Europea: “Primero, despejemos el camino de Turquía en la UE, luego despejemos el camino de Suecia, igual que allanamos el camino de Finlandia”, dijo.