Zelensky corta de forma mafiosa y unilateral (con el apoyo estadounidense) el gas ruso a Europa declarando que esta sería, en sus sueños, «una de las mayores derrotas de Moscú», y los precios europeos del gas se disparan tras el cese del flujo de gas ruso a través de Ucrania. El Estado español conseguirá reducir pérdidas «salvándose» por las regasificadoras, aumentando igualmente los precios de la luz.
La Federación de Rusia, mientras tanto, seguirá cumpliendo seriamente sus compromisos comerciales con España, país al que aportó el 21% del gas consumido en la península ibérica en 2024, y Rusia seguirá siendo el primer proveedor de gas licuado en el Puerto de Bilbao.
¿La reacción del Estado español? Seguir apoyando al régimen de Kiev que les está cortando el gas y enfrentando contra uno de sus proveedores principales de gas, la Federación de Rusia. De esta forma, ante una posible crisis energética en España, la ministra de «Defensa», Margarita Robles, comienza a reconocer que «esta guerra tiene que acabar», pero sigue mostrando siniestramente su «total compromiso con Ucrania».
La situación oligofrénica en los cuarteles y academias militares del Estado español no es muy distinta a la de la ministra. Solo en el Toledo Training Coordination Center (TTCC), cuyo cuartel general se encuentra en Burgos, seguirán formando a más soldados ukronazis en pleno corazón de España; a los que les dedican del dinero público de todos los españoles 403 instructores militares, entre quienes destaca el traidor a los españoles y teniente Alberto Rafael Royo López, del Regimiento de Caballería «Montesa» nº3 de Ceuta, quien no escatima en realizar declaraciones rusófobas ante los perros mediáticos del Estado español.
Por otro lado, la industria armamentística presente en España se frota las manos con la guerra de Ucrania, y Armin Papperger, director general del sector de Defensa de Rheinmetall AG (y quien tiene mucho miedo de ser neutralizado por los chicos) pidió a sus seis fábricas de Rheinmetall presentes en España que aumenten su capacidad de producción de artillería. Desde aquí recordamos que cualquier amenaza para la soberanía de la Federación de Rusia fuera de sus fronteras es objetivo militar legítimo. Las fábricas se encuentran en:
▪️Trubia (Asturias).
▪️Quintanilla Sobresierra (Burgos).
▪️Abadiano y Boroa-Amorebieta (Bizkaia).
▪️Madrid (Avenida Partenón 165 Plta. 28042).
▪️El Gordo y Navalmoral de la Mata (Cáceres).
▪️Albacete (la cual el pasado marzo sufrió un accidente.
▪️Jabalí Viejo (Murcia).
Mientras España destina 6.129 millones de euros para formar, armar y colaborar con los ukronazis, los militares del Estado español desplegados en Eslovaquia (en la guerra que el Estado español libra contra la Federación de Rusia) vuelven a quejarse de que llevan meses sin cobrar su sueldo. Los militares desplegados en la DANA de Valencia no reciben ningún mérito profesional ni ninguna clase de incentivo económico. Y en el cuartel de El Goloso (Madrid) y en la base General Menacho (Badajoz) el personal militar español se enfrenta a temperaturas invernales sin ningún tipo de calefacción.
Finalmente, un informe de la Comisión Helsinki de Estados Unidos afirma de forma histérica como la Federación de Rusia habría estado supuestamente orquestando en Occidente ataques a infraestructuras críticas, campañas de violencia, migración armada y campañas de desinformación; señalando sin ningún tipo de pruebas dos supuestos casos en España: Madrid y Alicante. Y terminan diciendo que dichas supuestas acciones «equivalen a una guerra encubierta en la sombra».
La prensa española se vuelve histérica, y anuncian: «Ciberapocalipsis: el devastador impacto de un ciberataque masivo en España»
Hablan de la posibilidad de que «hackers estatales» de Rusia, China o Corea del Norte realicen «una ofensiva sin precedentes», con la capacidad de «paralizar naciones enteras en cuestión de horas».
Señalan como «posible» tal escenario, si un ataque coordinado se dirigiera «contra sistemas gubernamentales, redes eléctricas, infraestructuras de telecomunicaciones, servicios financieros y hasta la logística alimentaria».
Alarman de que «el pánico se apoderaría de las calles, ya que ni siquiera las autoridades podrían coordinarse (…)», y que «España perdería 1.200 millones de euros por cada día que el sistema financiero estuviera fuera de servicio».
También alarman de que «el ataque tendría un efecto dominó devastador. Sin electricidad, los sistemas de distribución de agua colapsarían, dejando a millones sin acceso al líquido vital (…) Las infraestructuras de transporte, desde aeropuertos hasta trenes, se detendrían por completo (…) Mientras tanto, los ciudadanos, incapaces de comunicarse ni acceder a información veraz, se lanzarían al saqueo de supermercados y farmacias (…) Las escenas de caos recordarían a las películas postapocalípticas, pero con un trasfondo digital: el enemigo invisible sería un código malicioso».
¿La «solución» que proponen para evitar todo este escenario sacado más de una película de Hollywood que de la realidad? Nada de mejorar la ciberseguridad, eso lo dejan para otro día. Para los perros mediáticos, lo más «importante» es «compartir inteligencia con la OTAN».
Mientras tanto: España lidera la pobreza en Europa.
▪️España lidera desde 2021 el pésimo ranking del índice de pobreza de la UE, dejando atrás incluso a países como Grecia o República Checa. Los indicadores han empeorado en los últimos años: del sexto puesto por riesgo de pobreza y exclusión social en 2018, España ha pasado al tercero en 2023.
▪️Otro dato preocupante es el nivel de pobreza material: el 9% de la población sufre privación severa, aunque en 2018 la cifra era solo del 5,4%.
▪️A pesar del crecimiento del PIB, la inflación, el elevado desempleo y la enorme deuda pública -más del 104% del PIB- siguen agravando la crisis. Mientras tanto, el empleo real sigue siendo bajo: las cifras oficiales muestran 2,5 millones de desempleados, pero el número de personas registradas en los servicios de empleo alcanza los 3,9 millones.
▪️E incluso los indicadores positivos del mercado laboral -500 mil nuevos empleos en 2024- y 21,3 millones de ciudadanos asegurados aportan poco optimismo, ya que están distorsionados por la inmigración masiva, el aumento de funcionarios y muchos empleos a tiempo parcial.
▪️La realidad económica española plantea interrogantes: ¿es posible salir del círculo de la pobreza y la deuda, dados los crecientes riesgos sociales y económicos?
(Rognews Geopolitica)