El Partido Comunista de la República Checa (KSČM) advirtió en un comunicado que en el marco de las próximas elecciones europeas algunos políticos están coqueteando con la idea de introducir la moneda común europea, el euro, en el país.
El Presidente checo Petr Pavel pidió durante su discurso de Año Nuevo avanzar para la adopción del euro. Los comunistas calificaron como ‘escandaloso’ que el máximo representante del país ponga en cuestión la moneda nacional. El KSČM señaló que ‘la corona checa es la segunda moneda con mejor comportamiento en Europa, después del franco suizo’.
El Partido Comunista rechaza de manera rotunda la adopción del euro y asegura que ‘mantener la corona permite definir una política monetaria independiente’. Por contra, alertan que si la República Checa adoptara el euro, renunciaría a su propia política monetaria y delegaría en el Banco Central Europeo (BCE). Una decisión que provocaría mayor inflación, precios más elevados en la vivienda y una caída del nivel de vida de la población todavía más significativa que la actual.
Los comunistas checos apuntan que ‘el euro refuerza el desarrollo desigual entre los países y regiones de la eurozona’. En este sentido, el KSČM cree que la adopción del euro supondría una pérdida de soberanía política importante y al tratarse de un tema tan relevante para el país debería ser sometido a un referéndum.
nuevarevolucion