La Consejería de Educación de la Comunidad Valenciana ha anunciado el recorte de alrededor de 244 grupos de las Escuelas Oficiales de Idiomas, que supondría la desaparición de 8450 plazas y 61 puestos de trabajo de docentes.
La decisión ha sido duramente criticada por los sindicatos, que convocaron protestas el pasado miércoles, 17 de abril, para mostrar su rechazo. Grupos de docentes, alumnado y organizaciones sindicales se han concentrado frente a la Consejería portando lemas como “No a los recortes” o “Aprender idiomas es una necesidad, no un privilegio”, y anuncian nuevas movilizaciones si la situación no se revierte.
Muchos de estos docentes, con años de experiencia dedicados a la enseñanza de idiomas, temen por su estabilidad laboral y por el impacto en la calidad educativa de las escuelas oficiales de idiomas. Además, CCOO lamenta que “La administración ya no recorta de manera encubierta, sino que saca la tijera y ataca a un servicio público que es la única opción para muchas personas con recursos limitados, que necesitan formarse en idiomas para su desarrollo profesional, formativo o, incluso, desarrollo vital”.