La segunda vuelta de las elecciones presidenciales convocaba a dos candidatos de la extrema derecha, uno pro U.E y otro -aparentemente- no. El resultado fue apretado: Karol Nawrocki se impuso con el 50,89% de los apoyos, superando a su rival liberal , Rafał Trzaskowski logró el 49,11%, según datos oficiales de la Comisión Electoral Nacional. Desde la U.E se hizo una intensa campaña en favor del derrotado, llegando a afirmar que para que el país recibiera dinero comunitario tenía que ganar el que perdió y que Putin estaba interesado en que ganase Nawrocki.
