El debate general para el 78.º período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU) comenzó esta semana, donde los líderes de diversos países del mundo tienen la oportunidad de transmitir sus planes, preocupaciones y llamados a la acción ante problemáticas globales. Transmisiones que casi siempre terminan en el cubo de la basura, porque a quienes realmente dirigen el mundo no les interesa que se materialicen en aras de los intereses y el bienestar general.
Este año, se espera que unos 150 líderes de los 193 miembros de la ONU asistan a la Asamblea General. Se abordarán los asuntos de paz y seguridad internacionales de los que no se ocupa el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, además de aprobar el presupuesto anual de la organización.
Pues bien, en este contexto la CNN realizó una entrevista al secretario de las Naciones Unidas, Antonio Guterres. Ante la pregunta acerca del poder ejecutivo que tiene sobre el cónclave de la Asamblea General de las Naciones Unidas, Guterres dijo sin duda alguna: “Ningún poder en absoluto”. Y recalcó: “El secretario de las Naciones Unidas no tiene poder y no hay dinero”.
Guterres añadió lo único que tiene es voz: “Esa voz puede ser fuerte y tengo la obligación de hacerla fuerte”.
Pero todos sabemos que, aunque a veces esta se oiga, nunca o casi nunca se escucha.