<<En tiempos de ignominia como ahora a escala planetaria y cuando la crueldad se extiende por doquier fría y robotizada aún queda mucha buena gente es este mundo que escucha una canción o lee un poema: ellos saben muy bien que la patria de todos es el canto, la voz y la palabra; única patria que no pueden robarnos ni aún poniéndonos de espaldas contra un muro y deshaciéndonos en mil pedazos. Por eso digo una vez más. Que nadie piense o grite: no puedo más y aquí me quedo. Mejor mirarles a la cara y decir alto: tirad desgraciados somos millones y el planeta no es vuestro (J. A. Goytisolo) >>.
Picasso en manos del absolutismo de la especulación
¡No de su potencial universal contra la tiranía y colaboracionistas nazis!!! ¡Nooooo!!! ¡Ni al compás de los tambores de la libertad repercutiendo contra el olvidado sino en manos de la lengua del capital y su corrupción en doblones!!! No, Lía, no podemos seguir aguantando, no somos el pésame de la especulación “solidaria” el grito es más necesario que nunca, no nos prestemos al silencio no somos sus pajes, somos nosotras -¿recuerdas?- las uvas de la ira agitando las aguas, mar, río y monte, somos lo que definió Celaya: el golpe temible de un corazón no resulto. Querida Lía, ¿viste?, me encuentro en una reunión con las petroleras de la comunidad de vecinos, donde de alguna manera te hallas de lleno; se dirigen a vos, te conocen, han seguido tus publicaciones, y comparten tu lucha, no seguir contemplando las faltas sino pelear las soluciones, no dejar de soñar, para no dejar de vivir. La que acaba de hablar es Talía, la más joven e inquieta de todas, posiblemente la recuerdes en artículos de hace tiempo donde insertabas tus comentarios; sigamos pues juntas en voz de Talía, aunque todas saben que las estás escuchando. Sí, Lía, somos las que tu ya conoces, el fruto de la ira, el ser que se crece, las hogueras de una revolución a nado como Che, sobre un río revuelto entre el mar y ola que arremete contra el fondo del silencio. No somos Pandora, ni la caja del mal, por donde todos los males del mundo salen ni arruinamos la felicidad de nadie, no somos cuervos sobre la torre de la catedral de El filandón leonés, ni moscas de seminario de la formación ética en busca del punto exacto, que desquebraja y rompe nadando en el vacío. No, claro que no -ahorita soy Argi, la más veterana de todas, quizá me recuerdes, no hubo más fiel seguidora de artículos, de aquella, que vos (y sigue ), por el contrario, somos esa parte de luz y fuente de todo desarrollo somos pueblo, Lía, contra los que ningunean alienando y explotando y engrillando y maldiciendo la libertad. No, no somos monóxido de carbono ni el asfalto ni el tubo de escape ni los gases de efecto invernadero, somos siembra y sudor, la raíz enraizada, la sal de la tierra de un futuro que se espera y a de venir; lento, pero viene, precedió Benedetti.
Sí -dijo Davinia, que tomó la palabra- ¿Quién dijo, no somos nada, sino números? Somos las ramas batiéndose del árbol viejo que se regenera, somos la primavera, el futuro que se espera, motor de vida y construcción. No, no somos la ética impresa en victoria mediática al juego de las ingenuas, y por contra pretenciosas, en revuelo de abejas sin haber hallado la colmena que civilizar creyeron, y en ello, multiplicar hábitos contra sí mismas, no, somos los faros, que arremeten contra el crimen del silencio que secuestra tu liberación. Cierto, compañera Lía, soy Iraultza, nueva en la comunidad en la que todas representamos el Gernika de Picasso del ayer bombardeado, mientras el hoy desinformando bucea la marea tóxica. No, no somos su año de Picasso, en manos de la especulación, del fascismo y colaboracionistas de sus guerras, sino el año de las respuestas, el de Palestina, y el de África anticolonialista, contra el imperialismo que forma el caparazón sionista-capitalista al que hay que batir, desde todos los frentes, para crear los cimientos del propio Picasso. Estoy de acuerdo en el empeño de vernos reflejadas sobre los faros de luz que arremeten, como dijo Irati, contra ese decir que no dice nada abrillantando el vacío y la mentira al intento de secar el fluir de la fuente de la verdad. Y, en eso, es que interrumpe Yazmina, sobre el artista de la libertad que arremete, unido al pincel y lienzo de las evidencias por la misma causa antiimperialista en exposición insumisa de ojos como faros cubistas del siglo XX, por la República; iluminando la batalla intelectual de la revolución cultural: Frente Popular, milicianas y maquis, maestros y poetas, y artistas, contra las falsas democracias del Eje de la asfixia cerrando fronteras, abriendo campos de concentración, trancando a los verdaderos guías de la liberación de los pueblos en lucha atalayas en clave del mundo libre ¿Viste Lía, las muchachas?, cómo observan las leyes de la trampa, que perfila el mensaje, que no son sino catacumbas encofradas y templos a dedo de la jerga fantasmal, chistera parásita, oportunismo a forma de presidentes… y es que los Misterios de la Cultura <<son misterios sin cultura>> una mueca que premia el cuento con más cuento que Calleja, que por igual ha dictado que Picasso, es internacional, más allá de la universalidad de su mensaje y su coraje y su radiante mirada antifascista. Que sin pretenderlo tiene decenas y más decenas de Casas Museo, de las que se lucran mangantes y demás tunantes al estraperlo de su obra, y hasta podría decir si viviera que ninguna le representan.
Ya tu sabes Lía -es nuestra Violeta, la que habla, otro de los pétalos de la misma rosa que a ti se dirige- Acá como en Argentina, donde naciste y creciste, somos los mismos faros de referencia contra la alfombra del don y del don-nadie, especuladores de profesión aliados de lo oscuro, y lo rancio, que miran más el hongo de su ombligo que el volcán de nubes tóxicas. Querida compañera todas hemos echado de menos tus escritos; faros y secuencias de tu vida contra videntes del optimismo gratuito que todo alcanzan sin herniarse; faros contra el poder impuesto que todo lo corrompe, haciendo de la política la corrupción en cadena de explotación y del poder escribir y hablar, como aquél que sabe, ampliando aún más si cabe su ignorancia en el vacío a las duras descarada y a las blandas, por maduras, redimir a los tiranos; faros que requieren de tu memoria, compañera Lía, porque hay tiranos de la tiranía, y hay famélicas legiones antagónicas gigantes como lo fue tu compañero de vida y su padre, el abuelo de todas; faros con su dinámica activa, remolinos de viento, Quijotes y Sanchos y también Picasso’s, del derecho a la vida, de oleaje y vómito de lava contra las garras de la propiedad privada, del ego del fanatismo, y sus fronteras; faros de mar y mareas que se avecinan a su existencia sobre patrimonios y museos, sin mutilaciones en muerte acuñada ni panes ni peces entre rejas ni campos de concentración, mazo y cincel contra la explotación y especulación sin límite, faros como cantos rodados y cantos de lucha contra la mordaza en cadena de vasallaje.
Ya tu ves, Lía, sí, soy una de tus discípulas en la lista de las réplicas contra los que han hecho del 2023: el año del capitalismo (Oh, perdón), de Picasso, disculpa compañera, y sabia articulista. O sea, que el año del siglo más exaltado del fascismo desde la II Guerra Mundial, y del estreñimiento monetario de la crisis y su inflación que les apremia vía inodoro, gracias a los mismos intereses lucrativos, han decidido sea “el año Picasso”: ¡Año de la cultura difuminada en la nada en trasiego del agua de borrajas!!! Y, sí, como dicen las compañeras, somos faros en puerta tierra, sin perder la visión de futuro catalejo sobre el centro, de la distorsión del Eje, y su unión, la de los Milei’s cerrando puertas a la vida. La ceguera, ciega de miras, es nuestra principal enemiga compañera: es política del hoy, carrera profesional, a forma de alabar al capital. A los que no quieren ver, Lía, les llamo escoria: de la guerra ofensiva que imponen, los monstruos de la avaricia, que por igual se impone y apodera rancia y sebosa con mueca de inocente sonrisa, gustosa a ex proceso, sobre el proceso de la soberbia en trampa de historia ¡Cómo de pendeja camina la soberbia en frente popular con la ceguera!!!! ¡Cómo de pendeja la avaricia en manos del “arte” del capital y cada cual por su interés relincha como animal!!! Y el puesto de trabajo de un trabajador, como la especulación sobre el artista, se sortea como banderas incandescentes al mar, que por igual revierten, de la misma manera siempre a su espacio de gasolina y alquitrán pudriendo el mar ¡Cómo de pendeja la hipocresía mandataria contra la Málaga antifascista, amordazada, desfavoreciendo su alegría, donde naciera como genio del arte Picasso, un 25 de octubre de 1881: hijo de María
Picasso, y del profesor de arte de grandes obras José Ruíz Blasco. Padres a los que les fue arrebatado, si por exilio si por muerte el ‘genio’ de su seno al que tanto querían, lejos del hogar y lugar donde nació lejos de su familia y sus paisanxs… atacados hasta por la extrema derecha en una de sus desenfrenadas campañas en 1971 ¿Tiempo de “Paz”, no había terminado su ofensiva golpista en 1939?
Tiempo de prohibir y arremeter contra librerías y galerías del arte aludiendo a Picasso; tiempo contra la civilización civilizada, asumiendo el riesgo de celebrar los 90 (la misma edad hoy tuya Lía) del genio de la mirada desnudándote como rayos de sol y vidrio incandescente que un año y medio después muere, un 8 de abril de 1973, en la Francia “tierra de nadie”… donde el maqui y miliciano como partisano entregó su vida contra la ocupación nazi. Y todo dentro de un contexto de un régimen franquista genocida, en que el fanatismo criminal no cesó dando cuerda a sus garras, regando el odio más allá de sus fronteras en abuso de poder entre campañas empecinadas sobre la ceguera. Y, hoy, sobre el ayer encasillado a la deformación, a forma de falso cumplimiento propagandístico, en el que, si no se congratula al sátrapa marroquí bienvenido sea el gabacho: para la celebración del 50 aniversario de su vida efeméride, ‘celebración Picasso’, ajena a su pueblo consciente, de su vida entregada de lucha e independencia y causa, que embadurnan en la especulación los laboratorios de la encrucijada, en redobles de capital y sus ajustes sobre la epopeya en lienzo, dando paso al arte contra el fascio internacional, como si ellos, no fueran la parte de peso bautismal del Eje de la ”NO” ¿INTERVENCIÓN? Que por igual su horma obedece: la que unió a Francia con el nazismo en apoyo al dictador golpista contra la República.
¡Cómo de pendeja la verborrea, sobre la especulación, que enriquece a ambos poderes de un mismo sistema de intereses y depravación oscurantista!!! Con Marruecos, la ruina agrícola; con Francia, la desfigurada estrangulada cultura del arte al mundo, que usurpa ajena a ella lo que no representa por mucho aceite de oliva y nuez malagueña que engulla dado su gusto rancio a la mantequilla, pese algún que otro ensalzamiento para matar su eterna modorra al olé del ¡TODO POR LA ‘PASTA’!! Un todo por la plata inaugurando la Banca del arte y la trampa: Centro de Estudios Picasso en el (Museo Picasso de París) donde llueven euros a raudales gracias, a la cultura ajena de principios antagónicos -de cientos sino miles de exiliados del país cercado, y del mundo, que no la vanagloriaron- sobre el que será un Centro de Referencia (“Único”) sobre el artista malagueño, donde Málaga, y la República revolucionaria a la que cerró las puertas, incrementando tormentos de ni olvido ni perdón a manos del nazismo (Centro-Museo utilizado para difuminar su reacción criminal sobre la historia) que el propio pintor plasmó, en el Gernika, y no en el marco publicista de las alianzas europeas del neonazismo que les hace gozosos sobre la especulación millonaria.
PD.
Aunque los cielos se quiebren y el diluvio amamante la espera llegaré hacia ti compañera, para juntas brindar, por lo que de oxígeno en el siglo todavía queda, unir mi entrega a la intelectualidad que de ti queda revolucionando la vida que en otro tiempo, no tan lejano, colmó como espejo arrollador de capacidad y entereza, entendimiento y empatía.
Maité Campillo (actriz y directora d` Teatro Indoamericano Hatuey)