30 Saharauis retenidos en el aeropuerto de Barajas desde hace varias semanas han iniciado una huelga de hambre para denunciar las condiciones de «insalubridad» en las que permanecen allí y pedir al Gobierno de España que cumpla con su «deber» de asilo político y les conceda la libertad.
Casi una treintena de saharauis han pasado su primera noche en huelga de hambre en el aeropuerto de Adolfo Suárez Madrid-Barajas —donde algunos de ellos están retenidos desde hace varias semanas— como protesta por denegarles el Ministerio de Interior el asilo político que habían solicitado.
En una entrevista a RNE, Fatma El Galia, abogada del grupo en huelga, ha afirmado que sus defendidos «alegan y prueban» que son «activistas saharauis perseguidos». «Algunos han estado en prisión y han sido torturados. Estamos ante hechos probados para solicitar protección internacional, porque corren peligro si vuelven a su país», ha asegurado.
La huelga está secundada por 29 activistas de las “más de 30” personas que se encuentran en Barajas, todos ellos hombres distribuidos entre las terminales 1 y 4 y piden al Gobierno de España que cumpla con su “deber” de asilo político y les conceda la libertad.
El grupo denuncia, además, las condiciones de “insalubridad” en las que permanecen en el aeropuerto, ya que aseguran que se han registrado casos de chinches. «La situación es crítica. Se encuentran en una situación de extrema gravedad. Algunos de ellos tienen enfermedades», ha dicho la letrada sobre los retenidos.
