Hace no tanto tiempo, insurgente.org sufrió ataques tan contundentes que incluso se vio obligada a permanecer fuera de su actividad comunicacional durante algunos días. Afortunadamente, los daños ocasionados ya fueron solucionados y aquí estamos, aquí seguimos.
Hoy, sin embargo, nos vamos a referir a otra manera más sutil, aunque igualmente perniciosa, de no permitir acceder a nuestros contenidos, lo que supone una flagrante vulneración del derecho a la información, por una parte, y libertad de expresión, por otra.
Lectores/as de insurgente.org nos han comunicado que conectados/as a internet desde sedes de la Universidad del País Vasco (UPV) no pueden acceder a la web; les alertan que no es una página segura. Así son las universidades burguesas, como todas sus instituciones.
Este hecho es un golpe bajo, sin duda, pero también tiene su vertiente positiva que insufla ánimo, lejos de suceder lo contrario, que al parecer es lo que pretenden con prácticas tan deleznables. Si tratan de invisibilizarnos, señal de que algo estaremos incomodando a nuestros enemigos de clase. Aunque sólo sea un poquito, ese poquito ya es mucho.
Seguimos en la lucha. Aquí no se rinde nadie.
