La Iglesia católica, la que no tiene empacho en decir que está del lado de los pobres; la misma que nada en oro (posee 60.000 toneladas, lo que supone alrededor de la cuarta parte de todo el oro del mundo en la actualidad), intentó desahuciar de manera ilegal (y burda) a una familia en Legazpia (Gipuzkoa).
Sucedió la pasada semana, el jueves, concretamente. Lo ha denunciado el Sindicato Socialista de Vivienda del Goierri. La casa, sita en el barrio de Brinkola de la citada localidad, es propiedad de la Iglesia. En ella vive una familia con dos menores.
Junto a otras dos personas, el responsable de la Iglesia en Legazpia llegó a la casa e intentó desalojar ilegalmente a la familia, sin orden judicial ni nada que se le parezca. Decíamos que, además de ilegal, fue una acción burda, ya que el cura les cortó el suministro eléctrico.
A parte de denunciar este hecho, el Sindicato Socialista de Vivienda del Goierri ha exigido la paralización de todos los desahucios.