Lo intentaron todo para evitarlo. La empresa matriz y los sindicatos de la empresa no querían para nada que los intereses de los precarizados de la Auxiliar atravesaran sus muros y se asentaran en el mismísimo comité de empresa. Pero la sección «fija» del SAT de Navantia de San Fernando se puso al servicio de los más agredidos de su clase, de los que la Coordinadora de Trabajadores del Metal (CTM) es su representante más genuino. Y la brecha vio la luz. Se venía cincelando la cosa…Yunque a Yunque. Insurgente ha venido dando fe de ello.