El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, ha anunciado que a partir del martes 6 de mayo el ejecutivo abre una consulta pública con asociaciones, entidades y ciudadanos para recabar su opinión antes de decidir sobre la posición administrativa ante la opa del BBVA al Sabadell. No es vinculante pero se llama a que la gente opine. Al rebujo de ello, debería convocar también a algo más importante y que está pendiente de aprobación: si aceptamos la monarquía dictada por Franco e incrustada en la Constitución, o por el contrario, se restablece la República destruida por un golpe de estado fascista. El propio CIS no quiere preguntar sobre el tema, una respuesta por la tercera, dejaría -más aún- a la intemperie, a lo que ellos llaman «sistema democrático».