Salomé Pradas, que está declarando ante la jueza de la dana pero solo contestando a su abogado, ha trasladado la responsabilidad en la gestión de la dana a los equipos técnicos de la Conselleria que dirigía y ha insistido en que el “mando único” del Cecopi se sostenía sobre un comité de dirección en el que estaba integrada la delegación del Gobierno, según fuentes judiciales. En varios momentos de su relato, la exconsellera ha detenido su declaración a causa de las lágrimas y ha relatado que ella no tenía experiencia en la gestión de emergencias.
Ante la jueza, la extitular de Justicia e Interior ha explicado que era la primera vez que hacía frente a una emergencia de este tipo y que llevaba solo tres meses al frente del cargo. Pradas ha señalado que en materia de emergencias solo tenía un cargo “institucional” y que existían órganos técnicos con los funcionarios correspondientes que eran quienes proponían las medidas a adoptar. Por ellos, cuando se constituyó el Cecopi había un comité asesor. La investigada ha declarado que los planes de emergencia están diseñados para una aplicación automática y no tener que estar tomando decisiones.
En este sentido, ha señalado que no tenía conocimientos técnicos y que ella es licenciada en Derecho y profesora de Derecho Mercantil. De hecho, ha subrayado que los únicos que no tenía experiencia en el Cecopi era ella y la delegada del Gobierno. Así, ha enfatizado que ella no tenía ningún asesor en materia de emergencia.
Pradas ha defendido la existencia de un comité de dirección colegiada y coordinada formado por un representante de ambas administraciones. También ha apuntado la investigada que los Ayuntamientos tienen sus planes de emergencia para hacer frente al riesgo de inundaciones. Y ha reseñado que la Generalitat avisó a los consistorios conforme marca el plan.
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