El Ejército israelí ha reconocido que “la defensa no es hermética”, en referencia a la saturación provocada por los ataques simultáneos con drones y misiles. Los aliados y el propio Israel se han sorprendido con el uso operativo de armamento hipersónico por parte de Irán.
Este sábado 14 de junio circuló en redes sociales un vídeo que muestra lo que se describe como el impacto de un misil hipersónico Fattah-1 en la ciudad de Haifa, en el norte de Israel. La grabación, difundida por la cuenta @DOGDEGA —especializada en análisis bélico—, afirma mostrar “el momento en que el misil hipersónico iraní Fattah-1 impactó Haifa”. Aunque no hay confirmación oficial ni verificación independiente, la grabación ha encendido las alarmas.
La agencia de noticias rusa TASS ha recogido la noticia: “Irán utilizó al menos un misil hipersónico para atacar la ciudad israelí de Haifa, según informó la agencia de noticias Mehr”, afirman.
El Fattah-1 fue presentado por Irán en junio de 2023 como “el único misil capaz de penetrar todos los escudos de defensa”. Con un alcance de 1.400 kilómetros y una velocidad máxima estimada de 17.000 km/h, el misil puede alcanzar territorio israelí en minutos y su capacidad de maniobra lo hace extremadamente difícil de interceptar, incluso para sistemas como la Cúpula de Hierro.
Cinco meses después, Irán reveló la segunda versión, el Fattah 2, que introduce tecnología de vehículo planeador hipersónico (HGV). Este tipo de misiles puede cambiar de trayectoria durante el vuelo, realizar maniobras en la atmósfera y esquivar las defensas antimisiles tradicionales. Según medios iraníes, el Fattah 2 puede alcanzar objetivos a 1.500 kilómetros.
Pese a esta complejidad, el propio Ejército israelí ha reconocido que las oleadas de misiles y drones han saturado temporalmente sus sistemas, permitiendo que varios proyectiles lograran impactar en zonas habitadas. Los misiles hipersónicos, por su velocidad extrema y trayectoria variable, superan las capacidades para las que fueron diseñadas estas defensas.