Los manifestantes atacaron a la policía con ladrillos, botellas y fuegos artificiales e incendiaron vehículos el martes en una segunda noche de violencia antiinmigrante en la ciudad de Ballymena, en Irlanda del Norte.
La policía utilizó cañones de agua y porras de plástico en un intento de dispersar a una multitud de varios cientos de personas en la ciudad, a 40 kilómetros al norte de Belfast.
Al menos un coche fue incendiado y las ventanas de varias casas quedaron destrozadas. La policía también desplegó perros antidisturbios en el lugar.
Se lanzaron bombas incendiarias, piedras y fuegos artificiales contra la policía.
La violencia estalló el lunes tras una marcha pacífica en apoyo a la familia de la víctima de una presunta agresión sexual ocurrida el fin de semana. Dos adolescentes fueron acusados.
Los sospechosos no han sido identificados debido a su edad. Contaron con el apoyo de un intérprete rumano ante el Tribunal de Magistrados de Coleraine.
Su abogado dijo que los dos muchachos negarían los cargos.
Un tercer hombre fue arrestado el lunes por la noche en relación con la agresión sexual, pero fue liberado incondicionalmente.
El desorden comenzó después de la comparecencia de los dos chicos ante el tribunal y después de una protesta pacífica anterior.
El Servicio de Policía de Irlanda del Norte informó que 17 agentes resultaron heridos durante los disturbios.
El subjefe de policía (ACC) Ryan Henderson dijo que los oficiales estaban «trabajando activamente para identificar a los responsables del desorden por motivos raciales del martes en Ballymena y llevarlos ante la justicia».
Dijo que la violencia debería ser “condenada enérgicamente por toda la gente sensata”.
“Cualquier intento de justificarlo o explicarlo como otra cosa es fuera de lugar”, dijo ACC Henderson.
Durante el desorden, los residentes colocaron carteles que mostraban las nacionalidades de los que estaban dentro: uno decía «hogar británico» y otro «filipino vive aquí».
La Primera Ministra Michelle O’Neill dijo que lo que estaba sucediendo en Ballymena era “puro racismo”.
“Los responsables de esta violencia no traen más que odio, miedo y división”.
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