En estos términos se ha expresado, este sábado 19 de abril, Ali Shamjani, asesor para asuntos políticos del Líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, antes del inicio de la segunda ronda de las negociaciones indirectas entre Irán y Estados Unidos en Roma para alcanzar un nuevo acuerdo nuclear.
“Irán ha venido [a Roma] por un acuerdo justo y equilibrado, no para someterse”, enfatizó el político persa. Y ha trazado las líneas rojas de la República Islámica en las discusiones, rechazando cualquier acuerdo al estilo de Libia, lo cual llevó al desmantelamiento completo del programa nuclear y de misiles del país africano en 2003 y más tarde al derrocamiento de Muamar Gadafi en 2011 por rebeldes apoyados por la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
“Los negociadores iraníes han viajado a Roma con plenos poderes para perseguir un acuerdo integral basado en nueve principios: seriedad, garantías, equilibrio, levantamiento de sanciones, rechazo al modelo libio/emiratí, evitación de amenazas, celeridad, contención de actores perturbadores [como Israel] y facilitación de la inversión”, ha recalcado Shamjani.
Estas declaraciones se dan después de que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, advirtiera el pasado 8 de abril de que un acuerdo con Irán solo será posible si implica la destrucción de las instalaciones nucleares iraníes, o que de lo contrario la respuesta debe ser militar. Tras un encuentro con el presidente estadounidense, Donald Trump, Netanyahu dijo que “acordamos que Irán no tendrá armas nucleares. Esto se puede lograr mediante un acuerdo, pero solo si este es un acuerdo al estilo de Libia: que entremos, destruyamos las instalaciones, desmantelemos todo el equipo, bajo supervisión y ejecución estadounidense”.
Desde Teherán han calificado la mención del “modelo libio” como “en esencia una amenaza directa contra Irán” y han subrayado que la República Islámica nunca renunciará a su programa nuclear pacífico, y su programa convencional de misiles balísticos que son especiales para la defensa legítima del país.
En este sentido, el canciller iraní, Seyed Abás Araqchi, quien representa a Irán en las discusiones, aseguró el viernes que solo es posible llegar a un acuerdo con EEUU si deja de lado las “exigencias poco realistas”. Esta afirmación se producía después de que el enviado de EE.UU. para Asia Occidental, Steve Witkoff, hiciera manifestaciones contradictorias sobre el programa nuclear iraní. Así, el diplomático estadounidense, primero, se abstuvo de reclamar el desmantelamiento total del programa nuclear pacífico iraní, para luego considerar, como requisito previo a un acuerdo, que debía darse la eliminación completa del “enriquecimiento nuclear y del armamento”.
Hispantv