La organización antirrepresiva independiente Tinko, denuncia que los carceleros de la cárcel de Zaballa (Araba) están llevando a cabo una huelga de manera encubierta. No la han convocado, pero están cogiendo bajas. Y para eso alegan que no tienen personal suficiente. Esto implica que varias de las funciones necesarias para cubrir las necesidades de los presos están siendo desatendidas.
Eso se traduce a que en las últimas semanas están manteniendo a los presos sin actividades y sin salir del módulo. También afectadas varias comunicaciones que los presos tenían previstas.
Tinko, subraya que “la cárcel no sólo es un medio para eliminar de la calle a todo aquel que no entra en los parámetros de la sociedad burguesa a causa de la exclusión y la miseria, sino que es una de las herramientas más importantes para proteger los beneficios de los poderosos, y los carceleros, que no son más que unos parásitos, están pidiendo unas migas de pan más a cambio de esa función de criado que cumplen, aunque sea a costa de los más indefensos”.
Además de solidarizarse con los presos que están sufriendo esta situación, Tinko señala que “una vez más los secuestradores están atacando los derechos más elementales de los presos en beneficio de sus intereses particulares, así como la dejación que hace la administración pública”.
A pesar de que las competencias penitenciarias están en manos del Gobierno Vasco, en las cárceles de este territorio continúa la represión.