El pasado 26 de marzo, día de los Órganos de la Seguridad del Estado, fueron entrando al Salón Portocarrero del Palacio de la Revolución mujeres y hombres a quienes debemos la sobrevida; a quienes la Patria debe, como a tantos otros cubanos, su integridad física y espiritual.
Eran las cuatro de la tarde cuando comenzó el encuentro entre el Presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y un grupo de 66 combatientes pertenecientes a los Órganos de la Seguridad del Estado, entidad que ese día cumplió justamente 66 años de fundada.
“Constituye un honor recibirlos aquí en Palacio”, dijo el Jefe de Estado a sus interlocutores. Y mencionó, entre otras razones, las historias de vida de esos combatientes, el compromiso, y también el legado, la vigencia “de la obra construida por ustedes para las nuevas generaciones”.