El Ministerio de Defensa de Ucrania ha decidido suspender el uso de un lote de granadas de mortero defectuosas tras recibir denuncias de fallos durante su uso en el frente contra las tropas rusas. Según ha informado el ministerio, esta medida estará en vigor «hasta que se determinen las causas del mal funcionamiento».
La plataforma de noticias ucraniana Dzerkalo Tyjnia reporta, según NTV, que al menos 100.000 granadas de mortero calibre 120 milímetros, producidas por una fábrica nacional, han sido retiradas del frente. Algo que el conocido periodista de guerra ucraniano Yuriy Butusov califica como un caso de «negligencia criminal».
Soldados ucranianos comenzaron a denunciar problemas con las municiones a principios de noviembre, según informó la emisora privada 1+1. Entre las fallas detectadas, se mencionó que algunas granadas no explotaron, otras se atascaron en el mortero y algunas incluso cayeron junto a la posición desde donde fueron disparadas, poniendo en peligro a las propias tropas.
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