El desmantelamiento del sistema público de pensiones y los recortes no sólo continúan, a pesar de la lucha del movimiento pensionista, sino que se han acentuado y acelerado.
Y ante esto, los gobiernos de ayer y de hoy y sus cómplices, los aparatos políticos y sindicales siguen contando cuentos a los pensionistas y a las trabajadoras y trabajadores.