El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, extendió por un año más la Ley de Comercio con el Enemigo de 1917, regulación bajo la cual se impone el bloqueo económico, comercial y financiero a Cuba. La infame firma la estampó el pasado miércoles, 18 de septiembre.
En un escueto memorando, enviado al Departamento del Tesoro y publicado en el Registro Federal, Biden dijo que adoptó esa medida porque el ejercicio de esa reglamentación respecto a Cuba es de interés nacional para su país.
Además, subrayó que en consonancia con la autoridad que posee, prolonga hasta el 14 de septiembre del próximo año el ejercicio de esas imposiciones, tal como se implementa en las Regulaciones de Control de Activos Cubanos.
La Ley de Comercio con el Enemigo, promulgada en el periodo de la Primera Guerra Mundial, faculta al gobierno de turno en Washington a restringir las actividades comerciales con cualquier nación que considere adversaria.
