La hipocresía (y el cinismo) es inherente a muchas personas, sobre todo a los políticos profesionales al servicio del capital, pero hoy vamos a referirnos al presidente del gobierno español, Pedro Sánchez. Este señor y todos quienes le apoyan (la socialdemocracia española, vasca, catalana y galega) son merecedores de este señalamiento en torno a los acontecimientos de Ucrania.
Sánchez y su gobierno son aliados del Ejecutivo neonazi presidido por Zelenski. Y apoya a este desde su propio gobierno y a través de la OTAN. Sin embargo, no es difícil escuchar a Sánchez decir que están “trabajando para una paz justa y duradera”.
Su desfachatez es de mayúsculas proporciones, porque difícilmente se puede trabajar “para una paz justa y duradera” cuando lo que realmente se hace es enviar armas al régimen de Kiev.
Victor Ternovsky nos lo explica a través de este ilustrativo vídeo: