Por más de que vayan de triunfadores, el Estado sionista está lejos de ganar su brutal ofensiva lanzada contra el pueblo palestino, al que pretende desaparecer, pero están a años luz de conseguirlo. Una cosa es el deseo y otra la realidad. Los agresores también son agredidos por quienes les asiste la legítima defensa. El pueblo palestino resiste y cuenta con la importante ayuda de otros pueblos hermanos. Desde el Líbano, por ejemplo, cuenta con la ayuda de Hezbolá.
En esta ocasión, los proyectiles y drones lanzados durante la jornada del lunes por el partido-milicia libanés Hezbolá contra territorio del norte de Israel han provocado un grave incendio que ha obligado a cortar varias carreteras.
Según diversas fuentes, más de mil hectáreas han sido calcinadas por las llamás que han arrasado, también, con varias viviendas en Kiryat Shmona, donde los equipos de emergencia trabajan para intentar sofocar las llamas. La gran mayoría de los habitantes de la zona habían sido ya evacuados, informa el diario (esto último según ‘The Times of Israel’).
Al parecer, hay focos en el kibutz de Kfar Giladi, al norte de Kiryat Shmona, en el monte Adir y en la zona de Amiad, lo que ha provocado el corte de las principales carreteras de la región de Galilea.
La Policía ha informado de que está «evacuando casas, redirigiendo el tráfico y registrando varias zonas en las que los bomberos están sofocando las llamas con ayuda».