La serie de ataques físicos o de situaciones de acoso a políticos en Alemania ha hecho sonar las alarmas en el Gobierno de coalición de socialdemócratas, verdes y liberales del canciller Olaf Scholz. A raíz de la agresión a Matthias Ecke, la ministra del Interior.
La ola de agresiones a los políticos profesionales se enumera; los ecologistas fueron agredidos y acosados, con 1.219 ataques el año pasado, seguidos de los ultraderechistas, con 478 ataques, y de los socialdemócratas, con 420.
Los actos de violencia contra cargos electos aumentaron en un 53% respecto al 2022 y habló de una “escalada de violencia antidemocrática”. Faeser anunció también un acuerdo para impulsar un endurecimiento del Código Penal para castigar con más dureza los actos de violencia u hostigamiento contra figuras de la vida pública y para agilizar estos procesos judiciales.
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Un diputado de extrema derecha, Mario Kumpf (en la foto), de la AfD en Sajonia, recibió un puñetazo en la cara en un supermercado el miércoles por la tarde en la ciudad de Ebersbach-Neugersdorf, Ala cabar la acción, el presunto agresor, un hombre de 53 años, hizo con toda naturalidad sus compras después de golpear a Kumpf en el aparcamiento del supermercado