En estos días se pueden leer diversos titulares que hablan de supuestas declaraciones de la Organización de Naciones Unidas sobre derechos humanos en Cuba, en torno a condenas a participantes en los disturbios de julio de 2021. En esta ocasión, la abanderada de la campaña es la organización no gubernamental Prisoners Defenders, presencia recurrente en shows mediáticos alrededor de esta temática.
Enfatizan en el juicio “contundente” del organismo internacional, “sin precedentes” en lo que respecta a la isla caribeña.
Vemos, una vez más, la puesta en marcha de resortes comunes: Uso de exageraciones, términos grandilocuentes, más la articulación de plataformas financiadas desde el exterior. ¿El objetivo? Dar peso a la tentativa ante los ojos de la comunidad internacional. Tales declaraciones contradicen lo expresado por la instancia internacional en otros momentos, donde ha destacado la labor de Cuba en este aspecto.
¿Qué es Prisoners Defenders?
Según su sitio web, se trata de una institución “sin ánimo de lucro” con sede en Madrid, España. Entre las organizaciones que referencian sus informes se encuentran el Congreso y el Departamento de Estado de EE.UU. Aunque declaran “la relatoría de derechos humanos, la acción jurídica y la defensa pro-democrática” como misiones principales, por ninguna parte mencionan las flagrantes violaciones cometidas en ese país, ni los crímenes de la potencia norteña en todo el mundo. Prestan exclusiva atención a Cuba y a algunas naciones de Asia.
¿De donde viene este interés? De la profunda filiación anticubana de su presidente, Javier Larrondo. El inversor cubano-español, orgulloso, declara haber trabajado “mano a mano” con el contrarrevolucionario Oswaldo Payá Sardiñas. Además, en 2011 ayudó en la fundación de la mal llamada Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), junto al criminal y cabecilla José Daniel Ferrer.
Mientras a Payá lo recordamos por sus vínculos con terroristas fuera de Cuba, con los cuales trabajó en la conformación de un programa de transición al capitalismo con preceptos afines a los postulados del Plan Bush. Después de su fallecimiento en un accidente, han querido erigirlo como un “héroe de la disidencia”, tan falso como los postulados que un día defendió. Y a costa de esto, su hija a construido una oportunista carrera política.
José Daniel Ferrer aún está en prisión por los múltiples delitos comunes cometidos, probados hasta el cansancio por autoridades cubanas. A esta calaña se vincula Larrondo, rostro público de Prisoners Defenders. Ya lo dice el refrán, Dios los cría y el diablo los junta.
Era de esperarse que tras las constantes frustraciones codo a codo con estos personajes, Larrondo quisiera probar su propio emprendimiento Made in USA.
La ONU y los derechos humanos en Cuba
Múltiples organizaciones no gubernamentales integran los mecanismos de Washington para garantizar sus intereses. El Observatorio Cubano de Derechos Humanos, la Asociación Civil Cronos y el Centro por una Cuba Libre son solo algunas de ellas, que públicamente reciben presupuesto del gobierno estadounidense, a través de la Fundación Nacional para la Democracia (NED). Más de una vez han estado involucradas en esquemas subversivos e intentos de desestabilización.
Si analizamos los espacios digitales que replican las afirmaciones de Prisoners Defenders, advertimos que forman parte de la maquinaria pro-yanqui contra la Mayor de las Antillas. Es común que entidades de este tipo presenten informes en instancias como la ONU, con el objetivo de deteriorar la imagen de Cuba. Un ejemplo reciente aconteció en octubre de 2023, cuando el Observatorio de Género de Alas Tensas presentó un informe sobre violencia de género en la Isla, durante sesiones previas al Examen Periódico Universal de DD.HH. en Ginebra. Forma parte de la ofensiva constante contra nuestro país, tanto desde el espacio físico como el digital. 16 días para pensar el activismo contra la violencia hacia las mujeres.
El enfoque defendido por Prisoners Defenders tergiversa lo sucedido en julio de 2021, cuando los disturbios promovidos desde EE.UU. amenazaron la paz característica de nuestras calles.
El Grupo de Trabajo para la Detención Arbitraria de las Naciones Unidas, ante quienes fue presentado el informe sobre supuestas violaciones a los derechos humanos en Cuba, no representa ni mucho menos la opinión de un organismo multinacional como la ONU. De hecho, el presidente de la 78 Asamblea Nacional de las Naciones Unidas, Dennis Francis,en una visita reciente a la nación caribeña, destacó el trabajo de Cuba “para promover la paz y la seguridad internacionales, los derechos humanos, el desarrollo, el derecho de las mujeres, de los niños, el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y muchos otros aspectos”.
Asimismo, el año pasado, Cuba fue electa como el país con más votos en la región, para integrar el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. ¿Quieren representatividad en la opinión de las naciones miembros sobre la Isla? Basta con ver los rotundos triunfos en las votaciones contra el bloqueo. Si a alguien se le vulneran los derechos, es al pueblo cubano, como resultado de la implacable guerra económica del gobierno de Estados Unidos.
Esa sí es una verdad contundente.
(Razones de Cuba)