Activistas del clima se pegaron hoy al suelo en el aeropuerto de Colonia-Bonn, en el oeste de Alemania, lo que obligó a suspender los vuelos, dijeron las autoridades.
La policía informó que cinco personas se pegaron a una pista de rodaje en el aeropuerto, informó la agencia de noticias alemana dpa. Los manifestantes fueron rápidamente desalojados.
El grupo activista Última Generación dijo en un comunicado que sus partidarios, en varios grupos pequeños, cortaron la valla perimetral, se acercaron al aeropuerto y luego se pegaron al asfalto con una mezcla de arena y pegamento.
El grupo exige que el gobierno alemán negocie y firme un acuerdo internacional sobre una salida global del uso de petróleo, gas y carbón para 2030.
Fue la última de varias protestas en aeropuertos realizadas por activistas climáticos en los últimos años que provocaron interrupciones en los vuelos.
La semana pasada, el gabinete alemán aprobó una legislación que impondría sanciones más duras a las personas que traspasen los perímetros de los aeropuertos.
El proyecto de ley, que todavía está siendo analizado por los legisladores, prevé castigos que pueden llegar a ser de hasta dos años de prisión para quienes invadan intencionalmente las áreas de operaciones de los aeropuertos, como calles de rodaje o pistas de aterrizaje, pongan en peligro la aviación civil o permitan que otra persona lo haga.
Hasta ahora, tales intrusiones sólo podían acarrear una multa, pero según la nueva ley propuesta, en algunos casos podría ser posible una condena de hasta cinco años.