2 niños murieron y al menos 10 resultaron heridos en un ataque aéreo turco en el distrito de Amedi en el Kurdistán iraquí el jueves por la noche mientras continúa el silencio internacional.
Las imágenes de video parecían mostrar a los aldeanos kurdos que huían de un ataque con aviones no tripulados turcos en el que murieron un niño de cinco años y un niño de 14 años.
Un niño de seis años estaba entre los heridos en el bombardeo y fue trasladado a un hospital en Bamarne.
Testigos presenciales dijeron que se trataba de un ataque aéreo turco y creían que los misiles fueron disparados por vehículos aéreos o aviones no tripulados.
Mukhtar, de la aldea de Zewa, Birqi Omar, dijo que las familias estaban haciendo un picnic cuando fueron atacadas.
“Turquía bombardeó a nuestras familias, mató a dos personas de 10 años e hirió a otra”, dijo.
Los servicios de inteligencia afiliados al Partido Democrático de Kurdistán (KDP) intentaron culpar del ataque al Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK).
Acusaron al grupo de resistencia kurdo de “disparar dos cohetes contra la aldea de Ardana en el sector de Bamarni” de Amedi, diciendo que dos menores murieron y dos resultaron heridos.
Pero las afirmaciones fueron contradichas por el padre de uno de los niños muertos en el ataque aéreo, quien insistió en que “los aviones turcos hicieron esto, Turquía bombardea a los niños kurdos”, diciendo que fue testigo del ataque.
El KDP está aliado con Turquía en su invasión y ocupación ilegal del Kurdistán iraquí.
Sus fuerzas peshmerga han lanzado ataques contra bases guerrilleras y han dado coordenadas de posiciones del PKK a las fuerzas armadas turcas.
El PKK acusó al partido regionalmente dominante liderado por Barzani de intentar “encubrir los crímenes de guerra de Turquía” en el norte de Irak.
Turquía ha sido acusada de una letanía de atrocidades desde que lanzó su invasión y ocupación ilegal del Kurdistán iraquí en abril de 2021.
Esto ha incluido el presunto uso de armas químicas, con alrededor de 500 ataques reportados en el último año, 70 de los cuales se afirma que tuvieron lugar la semana pasada.
Las investigaciones del Morning Star han revelado un impactante encubrimiento de los ataques con médicos amenazados por las fuerzas del KDP para cambiar sus informes de expertos después de tratar a los pacientes por síntomas consistentes con la exposición a productos químicos.
Una persona murió en el último ataque con misiles turco en un campo de refugiados el fin de semana pasado, que los críticos insisten en que es un crimen de guerra.
Dos civiles y tres guerrilleros del PKK fueron asesinados el mismo día que dos automóviles fueron atacados en Chamchamal, en el interior del Kurdistán iraquí.
El comandante del PKK, Cemil Bayik, dijo esta semana que Gran Bretaña, Estados Unidos y la OTAN respaldaban plenamente la guerra de Turquía contra los kurdos y el uso de armas químicas.
“La OTAN participa activamente en esta guerra, por eso es una guerra contra la OTAN”, dijo.
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