Otra deshumanizada actuación del Ejército estadounidense. ¿Pueden hacer, acaso, otra cosa que no sea destruir asesinar y robar? Nada que sorprenda, siempre han hecho lo mismo, y además gozando de insultante impunidad por parte de los organismos e (in)Justicia internacional.
El niño asesinado se llamaba Mehidi Hussein al-Falah, de 12 años de edad, jugaba con un grupo, también de menores, cerca del polígono de tiro controlado por las tropas de EE.UU. en las afueras del barrio Altwasouiya de esa localidad, donde las fuerzas ocupantes aterrorizan a sus residentes al disparar contra cualquiera que se acerque.
Los soldados de la ocupación estadounidense mataron al niño disparándole a sangre fría a pocos metros de distancia.
Fuentes locales informaron: “Los militares de Estados Unidos en la ilegal base en la ciudad de al-Shaddadi dispararon a sangre fría contra un niño que jugaba cerca de sus posiciones, lo que causó su muerte”.
Las mismas fuentes señalaron que “los soldados ejecutaron al niño disparándole directamente para intimidar a la gente de la zona que rechaza sus prácticas y las de la milicia Fuerzas Democráticas Sirias respaldada por ellos”.