Una montería organizada en una finca del municipio luso de Azambuja en la que fueron abatidos más de 500 animales ha generado indignación en Portugal, donde ha suscitado fuertes críticas de dirigentes municipales, partidos y ecologistas y va a ser investigada por las autoridades.
La polémica saltó después de que se compartiesen en redes sociales fotografías de la montería, que según estas publicaciones juntó a 16 cazadores -todos españoles, según La Sexta– en la finca Torre de Bela de Azambuja, a unos 40 kilómetros de Lisboa, donde fueron abatidos 540 animales, principalmente venados y jabalíes.
