Desde que se firmo el acuerdo no hay un solo día en que el acuerdo no haya sido violado. El Estados sionista ha asesinado a más de 400 palestinos y continúa sin permitir la entrada de ayuda humanitaria como se acordó.
A este respecto, Hamás ha emitido un comunicado que dice lo siguiente:
Lo que se afirma en la declaración conjunta emitida por las Naciones Unidas y más de 200 organizaciones humanitarias, afirmando que los obstáculos de la ocupación están poniendo en peligro las operaciones humanitarias en la Franja de Gaza y advirtiendo que la ocupación podría revocar el registro de docenas de organizaciones internacionales de ayuda, exige que la comunidad internacional tome medidas serias para obligar a la ocupación a poner fin a sus políticas criminales y movilizar todos los medios para brindar socorro a nuestro pueblo, ante la catástrofe humanitaria que enfrenta.
El gobierno del criminal de guerra Netanyahu, como lo atestiguan las Naciones Unidas y las organizaciones internacionales, está trabajando sistemáticamente para profundizar el sufrimiento de nuestro pueblo reforzando el asedio, utilizando la ayuda como arma y privando a civiles inocentes de su derecho a una vida normal, una extensión de la brutal guerra de genocidio en curso que se lleva a cabo en múltiples formas.
Esta política criminal constituye una clara e intolerable violación del acuerdo de alto el fuego firmado bajo el patrocinio del presidente Trump, junto con cientos de violaciones sobre el terreno que hasta ahora han llevado a la muerte de cientos de mártires, ya sea por el fuego de su ejército terrorista o como resultado de obstruir las operaciones de socorro y refugio para los desplazados.
Instamos a la administración estadounidense y a los mediadores que garantizan el acuerdo a que intervengan inmediatamente para protegerlo y asegurar su implementación, prevenir repetidas violaciones sionistas y obligar a la ocupación a cumplir con sus obligaciones, especialmente en los frentes humanitario y de socorro, a fin de garantizar que las operaciones humanitarias y el trabajo de las organizaciones internacionales de socorro no se vean obstruidos.
