Se sabe que dos días antes del comienzo de las elecciones las autoridades electorales prohibieron dos partidos políticos «pro-rusos» (Corazón de Moldavia y Gran Moldavia). Las prohibiciones se llevaron a cabo bajo la acusación de financiación ilícita. Además, se produjeron detenciones masivas previo a los comicios y se redujeron los colegios electorales en regiones que no respaldan al oficialismo.
El opositor Igor Dodon denunció fraude electoral. Expresó que este se habría producido en la diáspora, ya que en toda Rusia, donde existe una gran diáspora moldava, las sedes consulares de Moldavia han abierto tan solo dos puestos de votación, frente a los 301 en la UE.
En este contexto, el gobernante Partido Acción y Solidaridad (PAS) de Moldavia, que promueve la adhesión del país a la Unión Europea, se impuso en las elecciones parlamentarias celebradas este domingo 28 de septiembre, según informó la Comisión Electoral Central (CEC).
El recuento preliminar arrojó que con el 86,68% de las papeletas escrutadas, el oficialista PAS obtuvo el 45,01% de los votos, superando así al Bloque Electoral Patriótico del expresidente Ígor Dodón, que defiende el fortalecimiento de lazos con Moscú y alcanzó el 27,64%.
Los datos de la CEC también sitúan al Bloque Alternativa con un 8,81% de los sufragios, mientras que el partido Democracia en Casa registra un 5,8%.
A pesar de imponerse en las elecciones, el PAS podría haber perdido la mayoría absoluta que ostentaba previamente en el Parlamento, complicando su capacidad para gobernar sin alianzas.