Por supuesto que se trata de los recibimientos a lxs presxs políticxs revolucionarios porque, tan protegido como está el fascismo en el Reino de España, no hay presxs fascistas que engrosen la población penitenciaria de éste país.
Fue UPN quien hizo la pregunta y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, reciente y nuevamente señalo por la Justicia europea por encubrir casos de torturas, respondió que para sancionar hechos “incompatibles con el respeto a la dignidad de las víctimas”, el gobierno español ha manifestado su intención de abrir un nuevo camino: creará un “nuevo régimen punitivo” para oponerse a los recibimientos de presxs políticxs.
La información la facilitó en el Senado español. Aquí, el ministro explicó que, en aras de sancionar también administrativamente los futuros actos de bienvenida u ongi etorri de presxs políticxs, adecuarán a tal efecto la Ley de Protección Integral a las Víctimas del Terrorismo.
El derecho penal español incluye como delitos el “enaltecimiento del terrorismo” y la “humillación de víctimas”, pero, como muchos hechos no han podido ser sancionados de esta forma, quieren adaptar la Ley 29/2011. Para su aprobación, deben pasar por el procedimiento del Consejo de Gobierno y el parlamento.
Cabe recordar que, anteriormente, ya el PP y Ciudadanos hicieron propuestas similares. Incluso, en una propuesta que hizo al Gobierno del PP presidido por Mariano Rajoy, la AVT previó multas de hasta un millón de euros para quienes celebraran dichos actos.
Mientras tanto, no está de más recordarlo, el enaltecimiento del fascismo no se sanciona para nada. Cosas de la España Grande y Libre que sigue vigente, incluso con el Gobierno más “progresista” de la historia de España y de la humanidad.
