Decenas de conflictos laborales se desarrollan en Finlandia en estos momentos, tanto en empresas privadas como en organismos públicos. Mientras, el gobierno hace votos para entrar en la OTAN en la próxima reunión del mes de junio en Madrid, y ha convertido el ema en monográfico. Quizás, el más emblemático se desarrolle en la muy poderosa industria del papel donde desde el pasado 1 de enero hay una huelga que secundan miles de trabajadores, y está afectando a las plantas de celulosa y papel de UPM en Finlandia. La empresa UPM aún no se ha pronunciado oficialmente sobre el posible impacto financiero para el grupo, pero el sindicato cree que la huelga le está costando alrededor de 20 millones de euros (16,7 millones de libras esterlinas) a la semana.
La huelga involucra a las unidades de UPM Pulp, UPM Biofuels, UPM Communication Papers, UPM Specialty Papers y UPM Raflatac en Finlandia. La huelga está causando serios problemas con la disponibilidad de papeles gráficos y de etiquetas en toda Europa, y los sindicatos mundiales han pedido a los principales accionistas de UPM que presionen al grupo de 9.800 millones de euros para resolver la situación .