Ha sido el propio Partido Nacionalista Vasco (PNV), también conocido como Partido del Negocio Vasco, quien ha denunciado el hecho. Este tuvo lugar este miércoles en el pueblo gipuzkoano de Arrasate, con María Ubarretxena como alcaldesa del mencionado partido. La pintada, impresa en el cristal de la puerta del portal donde vive Ubarretxena dice: “Mozalik ez, adierazpen askatasuna” (Mordaza no, libertad de expresión).
En su denuncia, el PNV ha expresado que la acción “traspasa el límite del ejercicio público al privado y familiar”. Desde el partido de derechas gobernante de la Comunidad Autónoma Vasca (CAV), junto al PSE, añaden que la pintada es “un grave ataque a la libertad personal y familiar” que tiene el objetivo de “coaccionar, amedrentar y acosar a la alcaldesa”. El PNV ha denunciado el hecho ante la policía municipal y también de la Ertzaintza.
El partido presidido por Andoni Ortuzar dice no entender la acción pictórica, porque, según su criterio, “no es verdad que en Arrasate se aplique ninguna Ley Mordaza”.
Lo que no dice el PNV es que la Ertzaintza, que está a sus órdenes y al servicio de la burguesía vasca en detrimento de la clase trabajadora, está aplicando la ley Mordaza, desde el principio y de manera absolutamente indiscriminada, contra todo los agentes políticos que disienten y se enfrentan a la clase burguesa que tanto defienden.
Independientemente de que lo que se pueda pensar sobre la mencionada pintada, eso que dice el PNV, de que “traspasa el límite del ejercicio público al privado y familiar”, no es cosa que una torpe manera de mirar hacia otro lado.
Este sólo es un caso de los muchísimos que existen en que, de una u otra manera, el PNV ha aplicado la ley Mordaza: