De un modo paralelo a lo que dicen y tuitean los líderes del centro/derecha/extrema derecha, una batería de personajes «famosos» usan sus armas televisivas y de redes sociales para sus objetivos ideológicos. Obedecen a sus amos.
Por ejemplo lo que escribe Figo en su Twitter:
“Deja de chupar del bote y preocúpate de las empresas que dejaron Cataluña!!! La fuga de empresas de Cataluña asciende ya a 5.567 desde el 1-O”,
«¡Qué viaje más incómodo! Dices que es un honor acompañar a S. M. el Rey en su viaje a Bolivia, y después te dedicas a atacar la Monarquía».
«Bienvenido su Majestad aquí (en Portugal) no hay coletas».