Decía hace mucho tiempo el señor diputado del Congreso español por ERC que este partido, el suyo, nunca pactaría con “carceleros ni expoliadores”, en referencia al PSC y al PSOE. Pero, tremenda paradoja, desde entonces ERC no ha hecho otra cosa que pactar con los mencionados carceleros y expoliadores.
Hoy ha sucedido más de lo mismo. El Govern de la Generalitat ha cerrado un acuerdo para los presupuestos de 2023 con el PSC. El entendimiento se ha hecho público después de semanas de negociaciones, que se han intensificado en los últimos días, tras la cesión de ERC con la demanda del PSC de la B-40. Con los 33 diputados de los de Salvador Illa, el presidente Pere Aragonès ya tiene la mayoría absoluta para aprobar las cuentas.
Subrayar la reacción de la CUP en este caso. Como se sabe, esta formación política decidió en su día no reunirse con el Govern para los presupuestos de la Generalitat, porque no veían ningún tipo de margen de encajar modelos de país.
Ahora, coincidiendo con el acuerdo ERC-PSC han denunciado por boca de Eulàlia Reguant: “Hemos pasado de los ficticios presupuestos más progresistas de la historia a los presupuestos más tóxicos de la historia”.
Reguant ha prometido hacer una oposición en la calle “para barrer el régimen de todas las instituciones”. Al presidente Pere Aragonès ha acusado de “tirar toda ética y principios a la basura”.
Eulàlia Reguant ha comenzado su intervención diciendo: “En este país tenemos tres gobiernos: el oficial liderado por Pere Aragonès, el Gobierno Alternativo liderado por Salvador Illa y el gobierno en la sombra liderado por Sánchez Llibre para gobernarlos a los dos”.
De ERC y Aragonès nada más que decir. Lo de la Reguant y la CUP más parece un brindis al sol. Cada vez más socialdemócrata, la CUP hace bastante que dejó las calles para pisar las moquetas de las instituciones del régimen que supuestamente quiere barrer”.
“Ingobernables”, dijeron que iban a ser en el Congreso.