A ERC (lo mismo que a EH Bildu) los gobernantes del PSOE le han dejado en muchísimas ocasiones en evidencia. Esto, sin embargo, no es suficiente para retirarles su constante apoyo. ¿A que se debe sumisión tan indigna?
Ahora, el panorama se ha revuelto en torno a la reforma del Código Penal recién aprobada y que ERC, sacando pecho, la presentó como una victoria. Resulta que el Fiscal General del Estado, Álvaro García Ortiz ha publicado este miércoles el decreto para unificar criterios de actuación después de la reforma de los delitos de malversación por la Ley orgánica 14/2022. En el decreto, el Fiscal General afirma que se puede acusar de malversación agravada a los acusados de desvío de dinero público y sin que haya ánimo de lucro o enriquecimiento personal. Es decir, la Fiscalía General del Estado (FGE) comparte el criterio del juez Pablo Llarena y los fiscales del Supremo, que apuestan por acusar a los líderes del 1-O de malversación agravada, que puede implicar penas de prisión de hasta 12 años.
Pues bien, como es lógico, a ERC esta noticia no le ha hecho ninguna gracia. Su vicesecretaria general, Marta Vilaret, ha expresado que lo anunciado por el fiscal general “es un golpe de estado de la judicatura española”.
Como decíamos, es el enésimo ninguneo del PSOE a ERC. ¿Por qué lo decimos? Pues porque la Fiscalía General del Estado depende del gobierno de turno. De esto, además, se jactó el presidente Pedro Sánchez; y lo hizo con chulería desbordante. Para que luego ERC y EH Bildu nos digan que son cosas del «Estado profundo», como si el Estado español no hubiera sido «profundo» desde 1939 hasta ahora mismo; y no parece que vaya a ser diferente en los próximos años, gracias, entre otras cosas, al apoyo sistemático que ambas formaciones políticas le ofrecen.
Por si no se acuerdan de las palabras de Pedro Sánchez, aquí les dejamos este breve vídeo:
No viene mal, tampoco, recordar esta intervención:
