La Coordinadora de Trabajadores de Andalucía (CTA) quiere expresar públicamente su apoyo firme, rotundo e incondicional a la plantilla de Hitachi Energy Córdoba, que durante varias semanas viene sufriendo una escalada de represión, intimidación y medidas disciplinarias impropias de una empresa que presume de compromiso social y diálogo.
Lo que está ocurriendo en la factoría de Córdoba no es un conflicto aislado, ni un “malentendido”, ni un simple desencuentro en la negociación del convenio. Es el resultado de una estrategia calculada de actuaciones empresariales, destinada a quebrar la unidad de los trabajadores y frenar por la fuerza su derecho legítimo a la protesta.
SOBRE EL “ENCERRAMIENTO ILEGAL”:
La empresa ha calificado la protesta como “ocupación ilegal”, intentando criminalizar la acción colectiva.
CTA recuerda que el derecho a la libertad sindical, a la negociación colectiva y a la protesta laboral está amparado por la Constitución Española (art. 28), por el Estatuto de los Trabajadores y por la jurisprudencia del Tribunal Constitucional. Llamar “ilegal” a un acto reivindicativo es un intento burdo de desactivar la movilización mediante el miedo.
SOBRE LA LLAMADA A LA POLICÍA Y LA DENUNCIA:
La actuación de la Dirección solicitando presencia policial dentro de un conflicto laboral es un salto cualitativo gravísimo y totalmente innecesario. Este tipo de intervenciones están desaconsejadas incluso por la Inspección de Trabajo, que advierte que la presencia policial no puede utilizarse para sustituir mecanismos de negociación. CTA denuncia que la empresa ha judicializado el conflicto en lugar de afrontarlo con diálogo, respeto y responsabilidad.
SOBRE LOS EXPEDIENTES DISCIPLINARIOS:
Los expedientes abiertos a decenas de trabajadores son una medida desproporcionada, vengativa y carente de buena fe negociadora, contraviniendo el art. 89 del Estatuto de los Trabajadores, que exige una negociación leal, sin represalias ni condicionamientos. Desde CTA advertimos que toda sanción derivada del ejercicio de derechos fundamentales puede ser nula de pleno derecho, y así lo han establecido reiteradamente los tribunales.
Expedientar a quienes reclaman un convenio digno no solo es injusto: es una torpeza empresarial y un ataque frontal a la plantilla.
SOBRE LA SUSPENSIÓN DE ACTIVIDAD:
Suspender la actividad de la fábrica para “proteger a los trabajadores”, como afirma la Dirección, es un argumento tan débil que insulta a la inteligencia. El verdadero objetivo es evidente: romper la dinámica de protesta y trasladar a la opinión pública una imagen distorsionada del conflicto. No hay “riesgos eléctricos” que justifiquen una medida así. Lo que hay es miedo a la fuerza organizada de la plantilla. Y puede encubrir un presunto cierre patronal ilegal.
CTA QUIERE DEJAR LAS COSAS CLARAS:
En Hitachi Energy no hay un problema de seguridad: hay un problema de derechos cercenados.
No hay un problema de “ocupación”: hay un problema de negociación bloqueada por la Dirección.
No hay un problema de “indisciplina individual”: hay un problema de unidad de clase y dignidad colectiva.
Y todo Córdoba lo sabe. Las movilizaciones han sido masivas, pacíficas y ejemplares. La plantilla ha demostrado que no se deja pisar.
EXIGIMOS A LA DIRECCIÓN DE HITACHI ENERGY:
1. La retirada inmediata de todos los expedientes disciplinarios.
2. La reapertura real, no teatral, de la negociación del convenio.
3. El respeto absoluto a los derechos fundamentales de la plantilla.
4. La paralización de cualquier acción represiva o intimidatoria.
5. La restitución del clima laboral que la propia Dirección ha dinamitado.
UN MENSAJE A LA PLANTILLA:
CTA está y estará a vuestro lado, en la calle, en la fábrica y si hace falta en los tribunales.
No estáis solos. Vuestra lucha es justa. Y cuando una causa es justa, no hay expediente, ni comunicado corporativo, ni nota de prensa que la pueda frenar.
Este conflicto no se resuelve con miedo. Se resuelve con derechos, con respeto y con dignidad laboral. Y eso, compañeros y compañeras, lo tenéis de sobra.
CTA – Coordinadora de Trabajadores de Andalucía. NI UN PASO ATRAS.
Córdoba, a 4 de diciembre de 2025
