Desde el pasado viernes, el portaaviones USS Gerald R. Ford permanece fondeado en la bahía de Palma, donde sin reparo manda avisos rotundos: “Están entrando en un área restringida. Se le ordena que abandone la zona… Si no acata la orden, Estados Unidos podría tomar medidas defensivas y su buque podría sufrir daños”. Este mensaje, dirigido a embarcaciones que se acercan demasiado, ha captado la indignación de organizaciones sociales, así como la sorpresa de marineros y medios de comuniación locales.
Desde «Última Hora» se dice que el día 5 de octubre, uno de los barcos que ignoró la advertencia grabó un video en el que aparece el gigantesco buque con tripulantes en formación defensiva listos para responder ante cualquier incidente. Según las imágenes, los curiosos se aproximaron demasiado, activando las alarmas del USS Gerald R. Ford. La OTAN respalda cualquier acción que los capos del barco determinen.