Se trata de Louis Sarkozy, de 28 años. Según información facilitada por Le Parisien, este individuo, que pasó gran parte de su vida en Estados Unidos y asistió entre 2014 y 2018 a la Valley Forge Military Academy en Pensilvania, ha tenido la “brillante” idea apoyar la creación de un mecanismo que permita enviar a una parte de las personas migrantes que residen bajo situación administrativa regular y “pequeños delincuentes” al ejército francés mediante “un sorteo”.
Al parecer, la “propuesta” del hijo del ex presidente Nicolas Sarkozy se inscribiría en un proyecto más amplio de retorno parcial del servicio militar obligatorio en el Estado francés, que está siendo evaluado por el Gobierno.
Se debe recordar que, hace unos días, el jefe del Estado Mayor hizo unas polémicas declaraciones al respecto, donde pedía abiertamente a la población «asumir la muerte de nuestros hijos» para “disuadir a Rusia”.
Louis Sarkozy, que es candidato a las municipales en Menton (Alpes Marítimos) y cronista en la cadena RMC, planteó que el servicio militar podría incorporarse a penas judiciales para pequeños delitos, con un marco de formación supervisado por militares profesionales. Dijo, concretamente, que “no se trata de darles un arma el primer día, sino de encuadrarlos con legionarios y formadores, hacerlos soldados, y si son ingobernables, devolverlos a prisión”.
Cabe subrayar que su padre, Nicolas Sarkozy, pasó por la cárcel no hace tanto tiempo, y aún le esperan varios casos judiciales pendientes. Eso sí, el tal Louis nada ha dicho de incluir (como delincuente que es, y además de origen extranjero) a Nicolás; es decir a su padre.
A estos siniestros individuos les va la guerra, pero desde el despacho; el fusil que lo cojan otros.
