Según el líder fascista, Santiago Abascal, este nuevo sindicato de extrema derecha “estará al servicio de los españoles y no al servicio de partidos políticos o de causas ideológicas. Un sindicato que será para todos los españoles y no para forzar una inexistente lucha de clases”.
“No se arrodillará ni ante los poderosos ni ante la nomenclatura comunista como hacen otros sindicatos”, ha asegurado el líder de Vox, al tiempo de indicaba “que defenderá a los trabajadores, que no permitirá la ruina de España y que será sufragado por sus sindicados y afiliados” ya que “no se alimentará del trabajo de todos los españoles como hacen los sindicatos actuales”.
Ya el 20 de julio, Jorge Buxadé, vicepresidente Primero de Acción Política de VOX y Jefe de la delegación de esta formación en el Parlamento Europeo, anunció el nombre del sindicato que, según apuntó, “apoyamos, promovemos y ayudaremos en la medida de lo posible, con nuestras manos, con nuestra alma, con nuestro corazón y con todas nuestras fuerzas”. El nombre elegido fue «Solidaridad».