Die Linke (La Izquierda), hermanado con Unidas Podemos en el Parlamento europeo, cosechó ayer un estrepitoso fracaso. Perdió en el camino dos millones de votos que han buscado refugio en la abstención o en el original socialdemócrata o verde (SPD o Grüne). Su resultado no llega al 5% exigido por la Ley electoral para entrar en el Bundestag, y han tenido que recurrir al hecho de haber ganado en tres circunscripciones de la antigua RDA para poder entrar en el parlamento. Su deseo de llegar a la mayoría de 368 escaños sumándose a los socialdemócratas y verdes les llevó a una práctica política errática, decididamente anticomunista para borrar cualquier relación con la RDA. Críticas a la revolución cubana, a Venezuela, al gobierno sirio… fueron creando un programa muy a la derecha que hizo imposible a decenas de miles de sus votantes acompañarlos en estas elecciones, donde la abstención fue muy alta. Solo queda que muchos de sus dirigentes toquen el timbre de la casa común, del SPD o Los Verdes y sean reconocidos por su trabajo en favor del sistema con un sueldo generoso.
ALEMANIA. Los resultados de Die Linke confirman el fracaso de su viaje a la nada
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Han recibido lo que estaban pidiendo a gritos desde hace meses.
Aunque UP aún está lejos del discurso de Die Linke, que llegó a votar a favor de la prohibición de la participación del Partido Comunista en las elecciones, espero que al menos IU-PCE tome nota de lo que puede pasar cuando se pierden las señas de identidad.
joder los malditos eurocomunistas, son aun peor que las ratas. cosa que tocan cosa que joden. legara algun dia que esto reviente, y mas de alguno de estas ratas anticomunistas. si que van avolar por la patria y el rey. sea en españa en un lugar del mediterraneo o en el resto de europa.
«Die Linke»: «la» Izquierda.
Ellos se lo guisan y ellos se lo comen.
Hay pocas cosas más confusas que esa palabra. Nació en la Asamblea Nazional francesa en los tumultos que ocasionó la impensable, imposible e irrealizable Revolución francesa -un caos anárquico sin Orden ni Concierto que terminó con un soldado chusquero autoproclamándose Emperador: con lo cual, JAMÁS tuvieron vigencia ninguna de las ideas que formaban parte de la consigna «Liberté, Egalité et Fraternité», sino sus contrarios más contumaces y repugnantes-. Unos votaron a favor de aplicarle la guillotina al Borbón derribado y esos se fueron a la izquierda; y otros votaron en contra y se colocaron a la derecha. Fin del teatrico. «La» izquierda dejó de existir con Napoleón Bonaparte. En el Reino Francobourbónico sí que aún tiene sentido -el genuino francés- el ser de izquierdas por optar por una República que descabece al Establo de Derechas aún vigente y reinante del Borbón: Felipe el Infecto.
En Alemania ni hay Borbones ni otra familia dinástica reinando, así que lo de la izquierda en el sentido genuino francés carece de sentido. Oxímoron: el rey de Alemania ni es calvo ni tiene peluca, no existe; por tanto, la expresión «el rey de Alemania» es un oxímoron.
Después del hundimiento del burocrático socialismo soviético los restos que aún quedan de aquello se creyeron el cuento de que aquello se derrumbó por falta de democracia. Error. Falso. Y se engancharon a los valores más repugnantes de la memocracia USAimperialista. Y de la noche a la mañana se quisieron disfrazar de memos, de ilusos, de bobos y se travistieron como la izquierda democrática. Renunciaron así al socialismo y, por supuesto, al comunismo. Se tragaron las mentiras y las expandieron a los cuatro vientos. Eso es allí hoy «LA» izquierda.
En Alemania antes de nombrarse como «La Izquierda» (Die Linke) se travistieron como el Partido Democrático Socialista creyendo que el electorado alemán les iba a recompensar su labor. Pero PDS y SPD ocupan el mismo espacio electoral. Y los del SPD son mucho más zorros. Y tienen más implantación gracias a que sus mejores amigos están en las administraciones de las Grandes Empresas Alemanas. Mientras que éstas no se fían de los travestis excomunistas de la RDA. Para votar a las copias de la «ecosocialmemocracia» se vota a los «originales»: ecoverdes, fashionliberales o socialmemocrátas.
Y encima en estos años DIE LINKE no ha sabido generar nada de valor, salvo la cansina retórica política de decir en cada línea de sus documentos las mismas chorradas acerca de su inocencia y buena voluntad para ser más «demócratas» que nadie… Pero esas boberías apenas se las traga nadie, salvo los convencidos y paniaguados.
«Die Linke»: «la» Izquierda.
Ellos se lo guisan y ellos se lo comen. ¡Y la tragantaera es de caoba!
Hay pocas cosas más confusas que esa palabra: «Izquierda». Nació en la Asamblea Nazional francesa en los tumultos que ocasionó la impensable, imposible e irrealizable Revolución francesa -un caos anárquico sin Orden ni Concierto que terminó con un soldado chusquero autoproclamándose Emperador: con lo cual, JAMÁS tuvieron vigencia ninguna de las ideas que formaban parte de la consigna «Liberté, Egalité et Fraternité», sino sus contrarios más contumaces y repugnantes-. Unos votaron a favor de aplicarle la guillotina al Borbón derribado y esos se fueron a la izquierda; y otros votaron en contra y se colocaron a la derecha. Fin del teatrico. «La» izquierda dejó de existir con Napoleón Bonaparte. En el Reino Francobourbónico sí que aún tiene sentido -el genuino francés- el de ser de izquierdas: por poder optar por una República que descabece al Establo de Derechas aún vigente y reinante del Borbón: Felipe «el Infecto de Corona/Corina Virus».
En Alemania ni hay Borbones ni otra familia dinástica reinando, así que lo de la izquierda en el sentido genuino francés carece de sentido. Oxímoron: el rey de Alemania ni es calvo ni tiene peluca, no existe; por tanto, la expresión «el rey de Alemania» es un oxímoron.
Después del hundimiento del burocrático socialismo soviético los restos que aún quedan de aquello se creyeron el cuento de que aquello se derrumbó por falta de democracia. Error. Falso. Y se engancharon a los valores más repugnantes de la memocracia USAimperialista. Y de la noche a la mañana se quisieron disfrazar de memos, de ilusos, de bobos y se travistieron como la izquierda democrática. Renunciaron así al socialismo y, por supuesto, al comunismo. Se tragaron las mentiras y las expandieron a los cuatro vientos. Eso es allí hoy «LA» izquierda.
En Alemania antes de nombrarse como «La Izquierda» (Die Linke) se travistieron como el Partido Democrático Socialista creyendo que el electorado alemán les iba a recompensar su labor. Pero PDS y SPD ocuparon el mismo espacio electoral. Y los del SPD son mucho más zorros. Y tienen más implantación gracias a que sus mejores amigos están en las administraciones de las Grandes Empresas Alemanas. Mientras que éstas no se fían de los travestis excomunistas de la RDA. Para votar a las copias de la «ecosocialmemocracia» se vota a los «originales»: ecoverdes, fashionliberales o socialmemócratas. Que se sabe ya lo domesticados que están y que jamás van a salirse del «marco alemán».
Y encima en estos años de titubeo DIE LINKE no ha sabido generar nada de valor, salvo la cansina retórica política de decir en cada línea de sus documentos las mismas chorradas acerca de su inocencia y buena voluntad para ser más «demócratas» que nadie… Pero esas boberías apenas se las traga nadie, salvo los convencidos y paniaguados. Una vez más se ha cumplido el refrán popular: agua pasada no mueve molino.
«Die Linke»: «la» Izquierda ¿delinque?
Ellos se lo guisan y ellos se lo comen. ¡Y la tragantaera es decaoba!
Hay pocas cosas más confusas que esa palabra: «Izquierda». Nació en la Asamblea Nazional francesa en los tumultos que ocasionó la impensable, imposible e irrealizable Revolución francesa -un caos anárquico sin Orden ni Concierto que terminó con un soldado chusquero autoproclamándose Emperador: con lo cual, JAMÁS tuvieron vigencia ninguna delas ideas que formaban parte de la consigna «Liberté, Egalité et Fraternité», sino sus contrarios más contumaces y repugnantes-. Unos votaron a favor de aplicarle la guillotina al Borbón derribado y esos se fueron a la izquierda; y otros votaron en contra y se colocaron a la derecha. Fin del teatrico. «La» izquierda dejó de existir con Napoleón Bonaparte. En el Reino Francobourbónico sí que aún tiene sentido -el genuino francés- el de ser de izquierdas: por poder optar por una República que descabece al Establo de Derechas aún vigente y reinante del Borbón: Felipe «el Infecto de Corona/Corina Virus».
En Alemania ni hay Borbones ni otra familia dinástica reinando, así que lo de la izquierda en el sentido genuino francés carece de sentido. Oxímoron: el rey de Alemania ni es calvo ni tiene peluca, no existe; por tanto, la expresión «el rey de Alemania» es ontológicamente un oxímoron.
Después del hundimiento del burocrático socialismo soviético los restos que aún quedan de aquello se creyeron el cuento de que aquello se derrumbó por falta de democracia. Error. Falso. Y se engancharon a los valores más repugnantes de la memocracia USAimperialista. Y de la noche ala mañana se quisieron disfrazar de memos, de ilusos, de bobos y se travistieron como la izquierda democrática. Renunciaron así al socialismo y, por supuesto, al comunismo. Se tragaron las mentiras y las expandieron a los cuatro vientos. Eso es allí hoy «LA» izquierda.
No hubo comunistas en la República Democrática de Alemania (RDA). Curiosamente el KPD (Partido Comunista de Alemania) se volatilizó cuando se fundó la RDA. Y se invirtió -y pervirtió- la teleología histórica marxista que iría del capitalismo al anarquismo[1] pasando por el socialismo[2];y optó por la alianza progresista de socialistas y comunistas, aceptando la imposibilidad de construir el comunismo y descalificando su intento como utópico (y, por tanto, irrealizable): de ahí el nombre que adoptó al llamarse Partido Socialista Unificado de Alemania (SED: Sozialistische Einheitspartei Deutschlands[3]).
Muchos luchadores que soñaban con el comunismo fueron perseguidos, encarcelados, difamados, censurados, torturados y eliminados. Esa historia está aún por contarse como se merece. En Alemania antes de nombrarse como «La Izquierda» (Die Linke) se travistieron como el Partido Democrático Socialista creyendo que el electorado alemán les iba a recompensar su labor. Pero PDS y SPD ocuparon el mismo espacio electoral. Y los del SPD son mucho más zorros. Y tienen más implantación gracias a que sus mejores amigos están en las administraciones delas Grandes Empresas Alemanas. Mientras que éstas no se fían de los travestis «excomunistas» de la RDA. Para votar a las copias de la «ecoSOCIALmemoCRACK*CIA» se vota a los «originales»: ecoverdes, fashionliberales osocialmemócratas. Que se sabe ya lo domesticados que están y que jamás van a salirse del «marco alemán».
Y encima en estos años de titubeo DIE LINKE no ha sabido generar nada de valor, salvo la cansina retórica política de decir encada línea de sus documentos las mismas chorradas acerca de su inocencia y buena voluntad para ser más «demócratas» que nadie… Pero esas boberías apenas se las traga nadie, salvo los convencidos y paniaguados. Una vez más se ha cumplido el refrán popular: agua pasada no mueve molino.
@@@@@Notas:
[1] Entendido como «comunismo democrático libertario» que no otra cosa es la anarquía en tanto que comunismo libertario.
[2] Era lo que se llamó «dictadura del proletariado». Que actualmente podría tener más vigencia que nunca. Siempre y cuando se definieran bien cada uno de los términos de esa expresión. Hoy sabemos que «proletariado» tiene más que ver con el modo de reproducción (familia) que con el modo de producción (creativa destructiva: obsolescencia programada; ecología, sostenibilidad; materialismo ético donde la clase trabajadora debería de transformarse radicalmente y ser consciente de lo que hace a diario) y hay que saber atenerse a las consecuencias que de ello se han de extraer a favor de una dictadura ILUSTRADA ecosocialista de aquellos sujetos que sepan actuar realmente teniendo conciencia de lo que se traen entre manos con inteligencia poiÉTICA. Hoy por hoy dejar que voten o tomen decisiones aquellas personas bobas, memas que no saben de nada, pero que opinan de todo sin ciencia ni conciencia no es solo un grave error (gnoseológico) sino un horror (trágico) porque conduce a la vida humana y, en general, a la vida terrestre a su extinción más inmediata. Así que hoy es más necesario que nunca un «socialismo autoritario» -de AUTOR: donde se sepa quiénes son de verdad los AUTORES reales y materiales de la «Obra» que se está poniendo en práctica en un escenario a escala mundial- donde sean los racionales y pacientes trabajadores los que aprendan a tomar decisiones acerca de los problemas reales (no ficticios) que actualmente tiene planteada toda la humanidad y, por extensión, todo el plan*eta Gaia. Y esa es la tarea urgente e inmediata: la destrucción radical de las bases de estas estúpidas memocracias USAimperialistas que están basadas en un criminal, sexplotador y miserable pornocapitalismo tanatocrático.[3] https://es.wikipedia.org/wiki/Partido_Socialista_Unificado_de_Alemania.